*La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina*

...Temor de tortura y otros malos tratos 

República Popular de China Nami Jhaba, de 41 años, tibetano 

El ex monje tibetano Nami Jhaba fue detenido por la policía el 19 de abril y desde entonces está en régimen de incomunicación. Recientemente la policía devolvió algunos de sus objetos personales a su familia, motivo por el cual se cree que corre peligro de ser victima de tortura y otros malos tratos.

El 7 de diciembre, la policía fue al domicilio de su hermana, en la prefectura de Daofu, Región Autónoma de Tíbet, y le dio algunos de sus objetos personales, entre ellos un amuleto religioso. En la cultura tibetana, renunciar a este amuleto quiere decir que su propietario no controla ya su cuerpo, y podría significar que Nami sufre torturas o está en algún otro tipo de situación crítica. La policía dijo a su hermana que esperaban una decisión del gobierno central sobre el caso de Nami. Según fuentes locales, Nami fue detenido como sospechoso de "filtrar secretos de Estado" y primero estuvo recluido en la prefectura de Kangding, luego fue trasladado a Chengdu, en la provincia de Sichuan, y posteriormente enviado de nuevo a la prefectura de Kangding. No se sabe con certeza si ha podido acceder a asistencia letrada. 

La detención de Nami Jhaba se consideró directamente vinculada con su intento de entregar a un periodista extranjero imágenes de vídeo, grabadas en marzo, de cientos de policías disparando y deteniendo a monjes del monasterio de Langque y a otros ciudadanos tibetanos que protestaban en el monasterio. Durante una entrevista con un periodista de Radio Free Asia, el 9 de abril, Nami Jhaba afirmó que se consideraba en peligro de ser detenido por las autoridades.

Nami Jhaba fue monje en el monasterio de Langque y ha estado detenido dos veces en relación con las protestas de los monjes y por fijar consignas antigubernamentales en el monasterio.

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